La Agencia de Extensión de Pehuajó realizó un estudio sobre muestras lluvia y el polvillo del ambiente en el centro de la ciudad del municipio del interior bonaerense y detectó la presencia de todos los agrotóxicos “asociados a los tratamientos fitosanitarios que se realizan en el barbecho, el cultivo de soja RR y el cultivo de maíz RR”, o sea, las semillas transgénicas de Bayer-Monsanto. El químico 2,4-D fue hallado en el 50% en las muestras del polvillo que se respira en la ciudad.
El estudio se llevó adelante entre julio de 2016 y junio 2018 en el patio de la agencia de extensión, ubicada a solo tres cuadras de la plaza central de Pehuajó, y fue publicado a principios de este año bajo el título “Depositación húmeda y seca de fitosanitarios en la ciudad de Pehuajó provenientes de fuentes de contaminación difusa”.
La investigación estima que “un promedio de 97% del glifosato en el aire es removido por una lluvia semanal de 30 mm” y advierte que “las concentraciones máximas de los herbicidas Glifosato y Atrazina fueron más altas que las detectadas en otros países, posiblemente como consecuencia de las dosis agronómicas más altas utilizadas en Argentina”.
“Comprueba y reconoce que los agroquímicos interactúan con el clima del lugar, y no se degradan, sino que siguen moviéndose en el ambiente y recorren grandes distancias llegando a nuestros jardines, a nuestras plazas, a nuestros alimentos, a nuestras huertas, a nuestras plantas, a nuestro suelo y nuestros cuerpos”, denunció la agrupación ambientalista local Mo.VE.A y exigió al gobierno municipal planes de incentivo para la producción agroecológica.
Pehuajó, según datos oficiales del Ministerio de Agroindustria de la Nación, se encuentra en el séptimo lugar en el ranking provincial de uso anual de agrotóxicos con 2.700.000 litros/kilos. La investigación apunta otro dato relevante: desde la década de 1970 hasta la actualidad la superficie agrícola de Pehuajó ha ido incrementando, pasando a ocupar del 20 al 66% de la superficie del partido. En el año 2017 el 53% y 23% del área agrícola estuvo sembrada con soja y maíz.
Muestras del modelo agrotóxico
Para el estudio sobre agrotóxicos en Pehuajó se tomaron un total de 52 muestras –20 entre el 4 de julio y el 3 de diciembre de 2016, y otras 30 entre el 16 de octubre de 2017 y 12 de junio de 2018– tanto de polvillo como de lluvia, que luego fueron analizadas por el Laboratorio de Contaminantes Químicos (ITA-CIA) del INTA. Las pruebas se realizaron en el marco de la investigación “Los agroquímicos como fuente de contaminación difusa en Agroecosistemas”.
El análisis de las muestras indica que “los herbicidas fueron las moléculas de mayor frecuencia de detección”. En ese sentido, el estudio precisa que el herbicida 2,4-D fue detectado en un 24,5 % de la totalidad de muestras analizadas; Glifosato se detectó 21,3 % y AMPA el principal metabolito de glifosato (ácido aminometilfosfónico) se detectó 19,6%.Mientras que los herbicidas Atrazina, Acetoclor y S-metolaclor fueron detectados de forma individual en el 9,8 % de las muestras analizadas.
Glifosato y AMPA, mano a mano
Tras realizar el análisis general de las muestras, el informe diferencia la evidencia recolectada entre los depósitos secos, el polvillo del ambiente, y húmeda, la lluvia. En el caso del glifosato se detectó en el 37,5 % de las muestras de polvo y en el 19,5 % de las muestras de lluvia, mientras que el AMPA fue detectado en el 37,5 % de las muestras de polvo y en el 14 % de las muestras de lluvia.
“El mayor porcentaje hallado en las muestras de polvo sugiere que el movimiento de estos compuestos está asociado a su alta retención a las partículas minerales y materia orgánica del suelo”, precisa el estudio.
En tanto, el 2,4-D fue detectado en el 50 % de las muestras de depósito seco y en el 17 % de las muestras de lluvia. Respecto del 2,4-D, el estudio encabezado por Álvaro Pereyro señala que “este herbicida puede encontrarse en el mercado en diferentes formulados comerciales variando sus propiedades físico químicas, principalmente en lo que se refiere a presión de vapor”.
Pehuajó reclama
“Las fumigaciones con agrotóxicos llegan a nuestras poblaciones, respiramos esos venenos y consumimos agua de lluvia contaminada con tóxicos que nos enferman”, advirtieron desde Mo.VE.A al conocer la publicación de la agencia de extensión del INTA y reclamaron la sanción de una ordenanza para ejercer “el control y regulación de fitosanitarios” para proteger el umbral mínimo de protección de la salud de las poblaciones y el ambiente. Mo.VE.A también exigió a la gestión del intendente del Frente de Todos Pablo Javier Zurro, quien gobierna la localidad bonaerense desde 2007, que se lleven adelante “medidas para fomentar la agroecología como alternativa productiva, brindando asesoramiento, seguridad, apoyo y financiamiento a productores agropecuarios que quieran producir de forma sustentable”.