Pandilla Feminista invita al encuentro «Urge: diálogos feministas entre fotografía y activismos». La actividad se llevará a cabo los días 9, 10 y 11 de diciembre y propondrá el cruce entre imágenes fotográficas y activismos a través de tres ejes: Diálogos Transfeministas, Diálogos Ambientalistas y Diálogos Antirracistas. La inscripción puede realizarse a través de este link: Mañana se desarrollarán los Diálogos Ambientalistas, con la participación de la fotógrafa Célica Veliz, la politóloga y activista Flavia Broffoni, la narradora visual ecuatoriana Isadora Romero, la artista Agustina Triquell y Rosalía Pellegrini, coordinadora nacional de la Unión de Trabajadores de la Tierra.
«En medio de una pandemia mundial, reflexionamos sobre el modelo económico que el sistema capitalista propone: extractivismo, megafactorías de la industria cárnica, deforestación, quemas y plantaciones transgénicas para el agronegocio… La naturaleza entendida como un recurso a explotar es parte del negacionismo de la emergencia socio-ambiental«, denuncian desde Pandilla Feminista. Este jueves, de 10 a 13 horas, la fotógrafa Célica Veliz facilitará el taller de Antotipia y Copia a la Clorofila “Imágenes Vegetales”. En él se abordarán algunas de las técnicas fotográficas que utilizan materiales fotosensibles naturales para generar imágenes sobre papel o follaje.
Brotando conciencia
El mismo día, entre las 19 y las 21, se desarrollará el conversatorio “Brotando Conciencia”. Allí, fotógrafas y activistas de Argentina y Ecuador se encontrarán con el objetivo de pensar claves para defender y reconstruir nuestros territorios. La instancia contará con la presencia de la politóloga y activista Flavia Broffoni, la narradora visual ecuatoriana Isadora Romero, la artista, docente, editora e investigadora social Agustina Triquell y la campesina feminista Rosalía Pellegrini.
“Visiones Rituales”, de 21:30 a 22 horas, será una experiencia performática y audiovisual que reunirá a la multifacética artista y activista travesti Lola Bhajan, a la cantante y compositora de música popular nacida en Andalgalá, Catamarca, Nadia Larcher y a poderosas fotógrafas del Abya Yala: Maya Goded, Mara Sánchez y Citlali Fabian (México); Liz Tasa y Gihan Tubbeh (Perú); Catharina Suleiman (Brasil); Anna Da Sacco (Chile); Mayra da Silva (Uruguay) y Emiliana Miguelez y Natalia Roca (Argentina).
El viernes el encuentro continuará con los «Diálogos antirracistas».
«Urge que el privilegio blanco caiga. Los estándares de belleza, el consumo, las políticas públicas (y especialmente las represivas) están signadas por un racismo al que debemos presentar batalla en nuestras representaciones y accionares», manifiestan desde Pandilla Feminista.
El viernes d 10 a 12 se llevará a cabo el taller “Descolonizar la mirada”, con integrantes del colectivo Identidad Marrón: Romina Luna, militante feminista, fotógrafa antirracista y diplomada en géneros, políticas y participación y Sandra Hoyos, militante feminista conurbana y antirracista, participante de la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto Legal Seguro y Gratuito. Ambas abordarán la representación y visibilización de identidades, cuerpxs y sentires hoy contrahegemónicos y en lucha. Identidad Marrón es un colectivo de personas marrones-indígenas descendientes de los habitantes originarios de América, que busca visibilizar el racismo estructural en Argentina.
Nuestras identidades
A las 19 -y hasta las 21- tendrá lugar el conversatorio “Construyendo Nuestras identidades”. En él se pondrá en diálogo a la fotografía en primera persona como medio para transitar la identidad, la “toma de la palabra” desde la identidad racializada y el intercambio de esa producción con los activismos antirracistas de ahora. Esa instancia contará con la intervención de le artiste y fotógrafe Kichwa Eli Farinango (Ecuador), quien trabaja sobre temas migración, identidad y memoria. También participará Chana, militante de Ni Una Migranta Menos (Argentina) y Delfina Acosta (Argentina), activista trans de Salta.
La jornada del viernes culminará a las 22 horas con “Caminos visuales y sonoros del Abya Yala”. Durante una hora, se propondrá una alquimia de narradoras visuales y sonoras que se encuentran en una proyección de trabajos de ocho fotógrafxs de América Latina, con música improvisada por Longas Fieras Subversivas y Virginia Viki Style Sequeira (Uruguay) de Se Armó Kokoa, colectivo de rap afrofeminista.
El encuentro Urge comenzó esta mañana, con “Identidades en movimiento”. El inicio de la actividad ofreció un espacio de creación colectiva en torno a las imágenes. Fue coordinado por DN Agostini, fotógrafx Brasileñx, y la multiartista y activista Uruguaya Sofía Saunier. También se proyectó la selección de proyectos fotográficos y audiovisuales resultante de la Convocatoria abierta “¿Qué nos urge?”. Asimismo, se llevó a cabo el conversatorio “Desear es urgente”: un espacio de creación colectiva en torno a las imágenes junto a Andrea Testa (Directora de la película “Niña mamá”, Buenos Aires), Paula Pani (Médica generalista, Buenos Aires), Silvina Caserta (Fotógrafa, Bahia Blanca), Cármen Amador (Editora de Género Diario «El Tribuno”, Jujuy) y Valeria Lazarte (Red de docentes por el derecho a decidir, Santiago del Estero).
El rol de la fotografía
«La lucha de los movimientos feministas cruza todos los aspectos de la vida social, política y económica. Es una ola imparable que nos invita a la reflexión, al intercambio de ideas y a la visibilización de las problemáticas que nos atraviesan. Creemos en una construcción visual y colectiva que celebre la disidencia y denuncie un mundo que tiene que dejar atrás la hetero-cis-norma», dicen desde Pandilla Feminista.
«Nuestro movimiento no es binario. Nombrar y representar la diversidad son tareas urgentes: reivindicamos nuestro goce, nuestro deseo, la diversidad de nuestrxs cuerpxs cambiantes y potentes. Urge cambiarlo todo», desafían.
«En tiempos de aislamiento lxs activistas no nos detuvimos. Al contrario, tendimos múltiples redes de organización y de cuidado, presenciales y virtuales, que hacen posibles otras realidades», relatan las organizadoras de Urge. «Así como los feminismos necesitan ser transfeministas e interseccionales, a la fotografía le hace falta un pensamiento interdisciplinario que reflexione junto a quienes activan transformaciones en campos paralelos», reflexionan.
Agencia Tierra Viva: —¿Cual es la contribución de las imágenes en el contexto de los movimientos feministas, ambientalistas y antirracistas?
Pandilla Feminista: —En el contexto de los movimientos feministas, ambientalistas y antirracistas, las imágenes tienen un rol muy importante. Las fotografías funcionan como un dispositivo que nos invade a través de las redes, la televisión y otros medios de comunicación, fomentando en la mayoría de los casos una representación hegemónica. Pero justamente lo que está cambiando, en el transcurso de estos últimos años, es la posibilidad de difundir, de participar de esa difusión desde adentro de los movimientos, creando nuestros propios materiales, ya no formando parte de “lxs miradxs” sino creando propias narrativas y relatos visuales. Estas propuestas vienen a irrumpir y plantar este nuevo y necesario modo desde sus creadorxs, contribuyendo a mucha más información y ampliando las lecturas y los debates sobre la identidad, el territorios de los cuerpos y estereotipos y una variedad de temas importantes y desconocidos al momento. Sentimos que es un buen momento porque se están abriendo espacios para mostrar este tipo de trabajos que contribuyen a abrir nuevos imaginarios y mostrar la gran diversidad dentro de lo que somos y lo que hacemos.
—¿Cuál es el rol de la fotografía en este contexto de pandemia?
—El contexto de pandemia y aislamiento que hemos tenido que atravesar ha exacerbado algunas desigualdades sociales de manera muy evidente, muchas de ellas fueron registradas por los medios de comunicación desde un ejercicio de registro y denuncia y nos han mostrado lo que dolía ver: las muertes, la falta de recursos básicos para afrontar la cuarentena, la fragilidad y el desamparo de las personas en riesgo y también del sistema de salud. Pero también nos mostró la vida de ricos y famosos en primera persona, fuera de su profesión compartiendo recetas o ejercicios de gym. La fotografía y la comunicación fueron grandes herramientas que se experimentaron en un presente que no tenía palabras para describir lo que estábamos/ estamos viviendo. Esto pone en evidencia la fuerza de este lenguaje. La necesidad de lectura y consumo visual y la potencia de su simbología, de su evocación o su literalidad. Porque por otro lado, muchas personas que tampoco tenían a la fotografía como lenguaje, la han tomado para mostrar su intimidad, y entendido como se puede manifestar un sentimiento con la luz, la sombra y otros recursos expresivos que dispone la herramienta. De manera que podemos decir que su rol fue protagónico.
—¿Qué otras reflexiones se buscan «disparar» a partir de este encuentro?
—Queremos generar espacios de reflexión sobre las temáticas propuestas desde el análisis de problemáticas que ya no pueden esperar. Estamos convencidas que desde la interseccionalidad y el cruce de experiencias se pueden elaborar abordajes más integrales que nos acompañen en los procesos de cambio. La fotografía como práctica descentralizada del saber del fotógrafx, de acceso masivo se produce desde todos los ámbitos. Nos interesa saber cómo se representan, qué imágenes eligen para representar sus luchas los organizaciones y movimientos activistas. Y cuál sería el modo de acercarnos como fotógrafxs y comunicadorxs a darles mirada produciendo imágenes que no estigmaticen las problemáticas a tratar. Y que así colaboren a difundir sus necesidades y propósitos. Pero también es importante que las imágenes no nos digan todo, es necesario dejar un resquicio de duda para que quien mira pueda preguntarse y poner en duda su sistema de creencias. Así las fotografías como resultado de prácticas artísticas son potenciales para los procesos de transformación.
Fotos: Isadora Romero (1,2,3) | Natalia Roca (4, 5)